CERVEZA BEER BARCELONA

Es el estribillo que se escucha en toda la ciudad, generalmente interpretada por un pakistaní (afectuosamente paki). Estos individuos, se acostan a la salida de discotecas, en las calles principales, en la playa, a la salida del estadio, en cualquier lugar donde haya un potencial consumidor de cerveza.
El precio varía, 1 euro en la vía publica, 1,5 en la playa, 2 euros en los conciertos…
Si compras la misma lata de cerveza en el supermercado te sale a 0.50 euros.
Es un negocio muy rentable y está apoyado por el estado que elimina la competencia, los negocios están prohibidos de vender alcohol después de las 22:00 hrs, por lo que la única solución es comprarla a los lateros.
Pero ¿Cómo abastecerse con tanta demanda?; los lateros por lo general nunca tienen más de 4 latas en la mano, y siempre están frescas, si la policía los detiene, nunca llevan documentos, les decomisan las latas y les multan, pero ¿bajo qué nombre?
(A mí, una vez me multaron cuando estuve en Italia; todavía tengo el recibo, decía: viajar desprovisto de billete, multa de 50 euros al señor MARIO MORENO CANTINFLAS y luego la dirección de un tío que ya se mudo de casa).
Entonces, supongo que van acumulando multas y perdiendo mercadería en cada detención.
Para evitar de perder todo el stock, recurren a los escondites más imaginativos y anti-higiénicos: en los cubos de basura, entre las motos aparcadas, en los techos de los quioscos y sobre todo en las alcantarillas; ahora que sabes esto, ¿nos tomamos unas cervezas?
-Una amiga paso por Barcelona, después de 15 años sin vernos (fue un gusto teti), me llamo para vernos una tarde. La encontré junto con un grupo de amigos tomando cerveza en la playa, yo no los conocía, pero a pesar de eso, había uno, que parecía no tener nada en común con los demás (como en los psicotest, encuentra la pieza que no es del grupo), después de la breve presentación, note que omitió a este individuo y cuando pregunte por él, me respondieron que era el camarero. Era un paki que les estaba vendiendo cervezas (solo a ellos) y es que en la playa, ya casi no quedaba gente y este grupo parecía tener ganas de tomar…
-A altas horas de la noche, cuando llego el camión de la basura, Salí del hotel para recuperar el cubo ya vacio, cuando llego corriendo un latero; llego tarde, el basurero ya había descargado el contenido del cubo , junto con las latas escondidas en mi basura.(mala suerte).
-Era 31 de diciembre, y el ayuntamiento de Barcelona había anunciado ley seca desde las 16:00 hrs. Y como en la peli de los intocables, la policía hizo un cerco alrededor del centro de la ciudad, controlando las bolsas y maletines de todos los que quisieran entrar, en busca de alcohol para decomisarlo.
Algunos resignados, se bebían el contenido antes de cruzar la frontera, yo por mi parte no tenía problemas, me dirigía a mi centro de trabajo.
Mi sorpresa fue cuando logre cruzar el cerco policial o especie de aduana improvisada para la fecha; y es que estaban todos los lateros y pakis, vendiendo botellas de cava y champan a precios del prohibicionismo (vamos, como la ultima coca cola del desierto).
Si es que “hecha la ley, hecha la trampa”.
Salud por todo esto.